dissabte, de gener 08, 2005

Una lectura posmo y cínica de 'Noche de Epifanía'


TWELFTH NIGHT (NOCHE DE EPIFANÍA/NOCHE DE REYES). A propos de la reciente fecha.

El presente discurso tiene el discurso de mostrar mis impresiones, tras haber leído varias versiones sobre la conocida obra de William Shakespeare. El tono es lúdico y divertido, brillante (si tenemos que hablar en términos teatrales), para ablandar cualquier formalidad, pero el resultado es de tono grave.

En primer lugar, tengo que afirmar que la versión cinematográfica de Trevor Nunn (1996), es en mi opinión una interpretación afortunada desde el punto de vista formal, además que la dirección y el reparto también fueron, en términos generales, acertados. La versión de William Shakespeare sobre “Noche de Epifanía” es una comedia deliciosa, cuyas peripecias fluyen e involucran al espectador.

La historia es harto divertida, sin embargo, el análisis de los personajes pueden conducirnos a conclusiones mas bien perturbadoras. La comedia me encanta, pero encuentro a la historia en sí mas bien deprimente.

Noche de Epifanía, o la historia de dos arribistas con suerte

Para mí, desde un punto de vista más bien libre de análisis literario, la comedia es una suerte de manual sobre los distintos enredos de un par de trepadores para acceder a una posición social privilegiada. Alrededor de ellos observamos a distintos personajes, que en el contexto de la obra tienen un nivel o estatus social determinado, pero que en términos sociales son personas de todos los días, con sus motivaciones y problemas.

Personajes:

VIOLA. Es la inseparable hermana de Sebastián. Mujer carismática y talentosa. Tras un desafortunado incidente en alta mar, tiene que abandonar la nave en la que viajaba y separarse de su hermano. Sobrevive la penuria y llega a Iliria, país donde se vive en tensión a causa de una guerra. Es informada sobre el duque del lugar y decide ofrecerle sus servicios. Viola es una persona inteligente, que se percata de lo adverso que le son las condiciones en las que ha llegado a Iliria. Asimismo toma toda la ventaja que puede, debido a que no es ninguna inocente y pronto se da cuenta que puede desarrollar una agenda personal específica. Viola miente y manipula. Miente al disfrazarse y asumir una identidad que no es. Manipula al hacerse del favor del duque.

SEBASTIÁN. Hermano gemelo de Viola; nunca se ha separado de su amada hermana. Sobrevive a la azarosa noche de la tormenta en el mar. Alcanza Iliria, donde le suceden distintas vicisitudes. Es hermoso como Viola mas es impulsivo, manipula a quienes necesita para alcanzar sus objetivos. Utiliza al capitán del barco, su enamorado Antonio. Digamos que sobrevive gracias a sus instintos de gigolo y chacal.

ORSINO. Es el duque de Iliria, hombre de poder, impetuoso y temperamental. Enamorado irremediable de Olivia. Se dedica a tener una vida cómoda y ensimismada. No acepta mujeres entre su personal de servicio. Contrata a Viola, disfrazada de hombre, como músico y éste se convierte en un muy cercano consejero del duque. El carácter voluble de Orsino lo hace manipulable. Le gusta la compañía de los efebos y los imberbes, su amor por Olivia parece más platónico que amor.

OLIVIA. Aristócrata atolondrada que vive ensimismada en luto a causa de la muerte de su amado hermano. Rechaza las propuestas sentimentales de Orsino, puesto que le provocan displacer. Siente afecto por su bufón y confía en sus sirvientes. Se enamora locamente de Cesario, un empleado de Orsino. Comparte los gustos afectivos de Orsino, pero ella sí lo manifiesta sentimentalmente.
Entonces

Sobre la trama principal:

Viola lleva una vida incestuosa con su hermano, con quien al reunirse puede concretar obtener la lotería para ambos. Sebastián ha manipulado a Antonio, quien claramente está tan intoxicado de enamoramiento, que arriesga su integridad para poder seguirle y ayudarle en su camino a Iliria. Orsino, el poderoso duque de Iliria ha mentido todo el tiempo, esconde su estado de misógino con un supuesta obsesión por Olivia. La razón por la cual no acepta mujeres a su servicio es porque las odia en secreto, y prefiere la compañía de hombres jóvenes. El supuesto estado de enamoramiento que tiene por Olivia es solo una pantalla, el duque es homosexual, pero teniendo en cuenta el contexto y el estatus del personaje, semejante cosa no puede hacerse obvia. Nadie le cuestionará su hombría ni le sugerirá novias o pretendientes puesto que –según él- su corazón pertenece a Olivia. Es una condición cómoda, puesto que sabe que no importa cuánto insista, no le hará caso y socialmente será altamente aceptable verle “tan enamorado” y fiel a una sola dama. Cesario pronto se convirtió en su favorito y seguirá siéndolo.

Al descubrirse la identidad femenina de Viola se consolidaron los hechos que facilitarán el éxito social de Sebastián y Viola. Por un lado, Olivia casó con la imagen idealizada y enajenada que tenía de Cesario. Sebastián servirá de encarnación física masculina, pero quien mueve todos los hilos, quien realmente maneja el encantamiento de la dama es Viola. Orsino casó con Cesario, pero formalmente lo hizo con Viola. Su psique no le permite consumar una relación con otro hombre, pero no importa, ya que está con Viola y la imagen masculina de ésta no se perderá, a causa de la cercanía de Sebastián, que al ser el gemelo de ella, proveerá la imagen masculina que encantaba a Orsino. En resumen, se casó con la mujer bajo la premisa que continuará teniendo acceso, y muy cercano, al hombre (Sebastián).

Viola entonces concreta todo: casó con hombre poderoso enamorado de “ella”, pero no perderá a su otro gran amor, su hermano Sebastián. Su gemelo casó con la aristocrática Olivia, entonces –con la inteligencia de Viola- podrán manipular e intrigar cómodamente en Iliria, serán el poder detrás del trono, puesto que dos personajes muy importantes han caído rendidos a los pies de los extranjeros. Orsino no es muy listo y Olivia está demasiado absorta en sus emociones como para darse cuenta de la situación.
Perversos hay todos lados.