Notas en un retiro de ordenación 2

DIA 6 – miércoles 18

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Llevo una semana de viaje, y hay horas en las que siento como si llevase una eternidad. Hoy por la mañana cruzó por mi mente el pensamiento de que me gustaría que más amigos estuvieran aquí. Incluso me hubiera gustado que viniese mi mami. Pero bueno, no hay que fomentar ni alimentar sueños imposibles, así que a lo siguiente. Lo más interesante que hemos hecho fue la dedicación del kuti, o casilla de ordenación, para llamarle de alguna manera. Al terminar la ceremonia pensé que sería bueno agradecer a toda la gente involucrada por lo que ha hecho a mi favor. Mi práctica de meditación está como que rara, muy concentrada para después salirse de orden, y de regreso, lo cual no está tan mal. Hoy me dio también un ataque de no-sé-qué y me empecé a emocionar, empero, pronto recuperé la calma, la compostura y, ante todo, la serenidad.

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DIA 7 – jueves 19

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Hoy ha estado bien. Ya se acerca cada vez más el primer paso de toda la cosa. Me he imaginado la ceremonia de ordenación privada, la cual es muy seria y muy formal. Este día también he dicho no sé cuántas frivolidades, hasta he dicho que las ceremonias de ordenación han de ser como cuando salía la Jurado a cantar “…como una oooolaaa”. También me puse a reflexionar que a lo mejor convendría que me pusiese a pensar más en Shakyamuni y menos en las divas, a lo mejor habría mejores resultados. Ay, pobre Marc, ya le queda poco tiempo de vida, espiritual, claro. Era tan agradable, simpático, lindo, tierno, mono, acomedido, bien avenido, dispuesto, educado, inteligente, buena gente...

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DIA 8 – viernes 20
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Día extraño, bueno, regular y malo, o sea, hay de todo. No lo sé, la víspera de lo mío no me viene muy bien. Como que siento algún tipo de presión, no hacia mí en particular, pero como que en el ambiente, que ha estado muy tranquilo, a pesar de todo. Las charlas con Nandavajra han ido muy bien y en un tono serio pero no tomándoselo a pecho. Bueno, también he pensado un poco sobre mi ordenación y las implicaciones de todo el asunto. Claro que estoy contento (¿o aliviado?) con respecto a la venidera ordenación… Bueno, es de noche y ya ha tenido lugar la puya, y el aparatito este dónde se supone leería no ha servido. Pero chico, que no conoces las impresoras, ash. ¿Cuándo fue la última vez, que en viernes, me fui a la cama antes de las 23 horas?

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DIA 9 – sábado 21

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Primera parte. Día de silencio, y hasta ahora lo voy sobreviviendo holgadamente. Ciertamente ha mejorado bastante mi práctica de la meditación. Estoy un poco ansioso, pero no mucho. Por la noche será la ceremonia privada de ordenación. Lo que me preocupa es que los chicos se van a quedar todo el rato meditando, ay pobres, espero que no lo sufran demasiado, digo, por el culo, la espalda o las rodillas. Me gusta que en este ambiente tan afectado por la quietud, se haya dejado de lado, por lo menos un ratito, el tema de señalarme como el chico de moda. En Inglaterra, todo de repente se vuelve rígido y más bien antipático, la comida sabe a displacer y la oscuridad pesa, y mucho. El clima no está mal, a ver dónde nos lleva esta noche.

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Segunda parte. Bueno ya está. Soy Āryaprabha. “El que brilla con el esplendor de los nobles”. La noche fue sencillamente magnífica. Generalmente soy indiferente a los climas, arbolitos o montes, pero esta vez sí que fije en ello. Había un espléndido cielo estrellado. Siendo de la ciudad de México, generalmente no veo estrellas, toda vez que la nata de contaminación no lo permite. Pues me ha tocado un maravilloso cielo a todo dar. La oscuridad, que tanto temor me ha provocado en otras ocasiones, ahora fue un marco perfecto para la ordenación, ya que la comunidad de Padmaloka amablemente se prestó a crear un camino de veladoras, el cual me guiaba hacia el kuti. Me hubiese encantado quedarme horas y horas caminando lentamente dicho andador, pero no era posible, había que llegar a la cita con Nandavajra. Me presenté ante mi preceptor con humildad, pero convencido y en paz con la decisión a la que habíamos llegado. Súper, fue increíble, ay, de verdad maravilloso. No les puedo decir que pasa en la mentada ceremonia, únicamente les diré que fue muy especial. Regresamos después a continuar la puya, con medio retiro ya medio cansado de tanta meditación, y ya está. Tengo que decir que nunca había vivido una noche tan mágica, tan llena de cosas bonitas. Me he quedado muy contento, emocionado, pero con serenidad. Quién hubieses pensado tan solo hace un par de meses que llegaría aquí y que sería tan especial. Me siento muy afortunado y agradecido por haber vivido lo de esta noche, y madre mía, ¡todavía falta!

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DIA 10 – domingo 22

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Bueno, dormí razonablemente bien, con todo y las emociones del día. Es domingo, y me viene rico, puesto que he pasado un sabadito muy movido. Y todavía falta toda la semana, pero, ay, ¿cuánto tiempo llevo aquí? Los años de la vida, me parece. Hoy la meditación estuvo correcta, aunque encuentro que la gente del retiro parece estar un tanto cuanto cansada por lo de ayer, y no los culpo, cuando no eres la estrella de la peli, extrear tampoco es así como para venirse de espaldas. Estoy cansado, emocionalmente. Pero no queda de otra, hay que retomar fuerzas y seguir. Vinga Ary, fes-ho bé, fes-ho bé.